viernes, 15 de octubre de 2010

A PROPÓSITO DE MINEROS, MINAS Y MINERALES...

Una GRAN muestra de heroísmo, compromiso, solidaridad, fe, esperanza. Ejemplos de conceptos más utilizados por estos días. Ciertamente, los 33 mineros nos dieron muestras de todo eso, como también, lamentablemente, de lo bajo que puede caer Chile en materia laboral, económica y política. Es cierto, es un profundo alivio tenerlos arriba, y fue un profundo acierto del gobierno, el comprometerse a concho con el rescate. Menos acertada fue la cobertura de los medios nacionales más grandes del país, los que en vez de informar, terminaron desinformando a la población, la que tal vez nunca supo, y no sabrá jamás, qué cosas pasaron en el mundo, y en Chile, ese día Martes y Miércoles. Y toda esta semana, pues está claro que esos mismos medios - principalmente, televisión - exprimirán hasta la última gota, el notición.

Pero, el rescate no vale de nada si es que Chile no avanza, a través de sus aletargados políticos, hacia reformas laborales, políticas y económicas. Dentro de esto, está mejorar las condiciones de seguridad, obvio, remuneraciones, claro, y sindicalización, por supuesto, pues es necesario abarcar la mayor cantidad de ámbitos que permiten, a la vez, mayor justicia social y mayor democratización de la sociedad en la que vivimos.

En lo político, está más o menos claro, se trata de democratizar y permitir que la población chilena, la masa, el pueblo, la gente, puedan por fin dejar de ser consumidores, y transformarse en ciudadanos. Esto implica una reorganización del poder, descentralizar,  permitir mayor poder a las organizaciones socio-políticas - no necesariamente, partidos - cosa que esos ciudadanos puedan escoger, demandar, promover políticas públicas o proyectos de ley, derogar leyes, en fin, verdadera participación y movilización social.

En lo económico, creo esencial el volver la mirada sobre nuestros recursos naturales. El agua, los bosques, el suelo, el mar, el viento, el subsuelo, los minerales. He puesto, deliberadamente a propósito - como lo diría Mr. Smith - minerales al final.

Justamente, esta semana, el parlamento aprobó el pseudo royalty minero, justo cuando los mineros eran rescatados. Si no fuera por Twitter, se me habría pasado la semana sin saberlo. Tal vez, la vida, sin tener conocimiento que lo que se aprobó es una burla, con respecto a lo que muchos analistas - también patriotas tal como los mineros y rescatistas - entendidos en lo que hablan, estudiosos por mucho tiempo, políticos y economistas, exponen. Jorge Lavanderos, Edgardo Condeza, Marcel Claude, etc. Ellos demuestran con cifras, como a muchos les gusta, cuadros, gráficos, todo muy oficial y no irreal, que lo que a Chile le conviene es NACIONALIZAR EL COBRE, la mayor fuente de riqueza del país, o cobrar un verdadero Royalty, como corresponde a una nación moderna, según dicen muchos políticos que es Chile - ¡JA! - .

Un Royalty se puede explicar con la siguiente analogía. Para poner una fábrica de zapatos, se necesita, por un lado, el capital de inversión, que asegure la compra de maquinaria y mano de obra. Por otro lado, producir, para recuperar la inversión, y, además, pagar los impuestos por poner la fábrica. Esos impuestos se deducen de las utilidades, es decir, las ganancias que produce el negocio. Pero además, necesita el material, en este caso, el cuero, principalmente. Eso hay que comprarlo, se puede considerar costo.

El Royalty funciona de un manera similar al cuero. Hay un capital, inversión. Para operar, tiene que pagar impuestos. Pero para producir sus ganancias, las empresas mineras necesitan el cobre (en este caso, se trata del royalty minero). Como el cobre pertenece a todos los Chilenos, incluso según la Constitución de Pinochet,  las mineras extranjeras tienen que comprar nuestro cobre. Eso es el Royalty. Es la compra de nuestro mineral no renovable. Es la compra de aquello que permite que esas mineras generen una cantidad exorbitante de ganancias que finalmente circulan fuera, muy lejos de nosotros, los dueños del cobre. Y claro, debiera ser un precio muy justo, considerando esas exorbitantes ganancias.

Esto es lo que NO se hizo esta semana (martes 12 de Octubre de 2010). Esto es lo que no se hace desde los tiempos de Allende. Esto es lo que los gobiernos de la Concertación tuvieron miedo de aplicar, puesto que los dueños de esas empresas son quienes financian sus campañas (y lo dijo un ex-senador de la Concertación, Jorge Lavanderos). Y esto es lo que no se hizo en este gobierno.

¿Hasta cuándo?

El rescate sería inútil, todo el esfuerzo y el sacrificio en vano, sino se avanza realmente en esto. NO se trata de ideologías, se trata de un bien público. Se trata de Chile y los chilenos